El sangrado de encías es un problema común que puede afectar a personas de todas las edades. Si has experimentado sangrado al cepillar los dientes o al usar hilo dental, esto te interesa. En este artículo, exploraremos todo lo que necesitas saber sobre el sangrado de encías y cómo mantener una buena salud bucal para evitar el sangrado.
¿Qué es el sangrado de encías?
El sangrado de encías hace referencia al sangrado que ocurre en las encías al cepillarse los dientes o al usar hilo dental. Puede ser un signo de enfermedad periodontal o gingivitis, que es una inflamación de las encías causada por la acumulación de placa bacteriana. Si no se trata, la gingivitis puede progresar a una enfermedad periodontal más grave que afecta los tejidos y huesos que sostienen los dientes. Por eso, recomendamos ponernos en las manos un especialista bucodental para tratar este problema.
Posibles causas del sangrado
Varias causas pueden contribuir al sangrado. Algunas de las más comunes incluyen:
Acumulación de placa bacteriana: La placa bacteriana es una película pegajosa y sin color que se forma constantemente en los dientes. Si no se elimina adecuadamente mediante el cepillado y el uso de hilo dental, puede irritar las encías y provocar sangrado.
Enfermedad periodontal: La gingivitis, que es la etapa inicial de la enfermedad periodontal, puede causar sangrado de encías. Si no se trata, la enfermedad periodontal puede llevar a la pérdida de dientes y otros problemas bucales graves.
Cepillado o uso de hilo dental incorrecto: Un cepillado brusco o el uso incorrecto del hilo dental pueden dañar las encías y provocar sangrado.
Cambios hormonales: Algunas personas experimentan un aumento en el sangrado de encías durante ciertas etapas de la vida, como el embarazo, la menopausia o adolescencia, debido a los cambios hormonales que ocurren en nuestro cuerpo.
Soluciones para prevenir el sangrado de encías
Afortunadamente, existen medidas que puedes tomar para prevenir el sangrado de encías y mantener una buena salud bucal. Aquí tienes algunas soluciones efectivas:
Mantén una buena higiene oral: Cepíllate los dientes al menos dos veces al día usando un cepillo de dientes suave y pasta dental con flúor. No olvides limpiar entre los dientes con hilo dental a diario, mínimo una vez al día.
Visita al dentista con frecuencia: Programa visitas regulares al dentista para realizar limpiezas y revisiones dentales. El dentista podrá detectar y tratar cualquier problema de las encías en etapas tempranas, cortando de raíz cualquier enfermedad grave.
Sigue una dieta equilibrada: Aunque parezca que no, una alimentación saludable contribuye a la salud de las encías. Asegúrate de incluir alimentos ricos en vitamina C, calcio y antioxidantes en tu dieta diaria.
Evita el tabaco, alcohol y drogas: Estas sustancias debilitan el sistema inmunológico y aumenta el riesgo de enfermedades de las encías. No consumirlas es beneficioso tanto para la salud bucal, como la en general.
Controla el estrés: El estrés puede afectar negativamente la salud de las encías. Busca formas de manejar el estrés, como practicar técnicas de relajación o ejercicios físicos. Tomar bebidas con cafeína tampoco ayuda.
Como hemos visto, el sangrad no debe ser ignorado, ya que puede ser un signo de problemas dentales más graves. Si experimentas sangrado de encías de manera persistente o acompañado de otros síntomas preocupantes, busca atención dental profesional para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuado.
