Las causas más comunes de la pérdida auditiva

La pérdida auditiva es un problema de salud que afecta a todas las personas, independientemente de la edad y estilo de vida. Normalmente conforme nos hacemos mayores, estos problemas auditivos aumentan. Comprender las causas más comunes de la pérdida auditiva es fundamental para tomar medidas preventivas y buscar el tratamiento adecuado cuando sea necesario.

Si disponemos de buenos hábitos de vida y cuidamos nuestros oídos, evitaremos que estos problemas aparezcan antes de tiempo. Por eso, visitar frecuente a un otorrino puede ser una buena opción, ya que estos nos darán pautas para seguir y cuidar nuestra audición de manera efectiva y segura.

¿Qué factores causan nuestra pérdida auditiva?

Exposición al ruido constantemente

La exposición prolongada a sonidos fuertes es una de las principales causas de pérdida auditiva. Esto hace referencia a por ejemplo la maquinaria ruidosa en el trabajo (como en el caso de los obreros), escuchar la televisión o música a mucho volumen, etc. Al principio no pasará nada, pero con el tiempo, esta exposición daña el oído interno, lo que resulta en una pérdida auditiva gradual.

El paso de la edad

Es un factor inevitable y que a todos nos llega. A medida que envejecemos, es natural que experimentemos cambios en nuestra audición. Perdemos la capacidad de escuchar sonidos de alta frecuencia. Este tipo de pérdida auditiva es progresiva y dificulta la comunicación, especialmente en entornos ruidosos o con varias personas hablando al mismo tiempo.

Enfermedades del oído

Algunas enfermedades del oído, como la otitis media crónica, la otosclerosis y la enfermedad de Ménière, pueden causar pérdida auditiva. Estas enfermedades afectan las estructuras del oído interno o medio, causando problemas de audición.

Malos hábitos de salud

Factores como fumar, consumir alcohol en exceso y tener una dieta poco saludable contribuyen a la pérdida auditiva.

¿Cómo podemos evitar la pérdida auditiva?

Protección contra el ruido: Limitar la exposición a sonidos fuertes es muy importante. Usa protectores auditivos, como tapones para los oídos o auriculares con cancelación de ruido, al trabajar en entornos ruidosos o durante las actividades de ocio.

Controla el volumen al escuchar televisión o música: Al escuchar a través de auriculares, asegúrate de mantener el volumen a un nivel seguro. Evita escuchar música a un volumen alto durante períodos prolongados de tiempo.

Mantén una distancia segura: Cuando estés cerca de fuentes de ruido intenso, como altavoces o maquinaria ruidosa, asegúrate de mantener una distancia segura para reducir la exposición directa al sonido.

Ten una dieta saludable: Consumir alimentos ricos en nutrientes como pescado, frutas y verduras frescas, nueces y semillas en tu dieta diaria. Además, dejar de fumar y moderar el consumo de alcohol benefician tu salud auditiva y general.

Consulta a un médico si notas cambios en tu audición: Si experimentas síntomas como dificultad para escuchar, zumbidos en los oídos, sensación de oído tapado o cualquier otro cambio en tu audición, no dudes en consultar a un otorrinolaringólogo u otro profesional de la salud auditiva. Un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado ayudan a prevenir la pérdida auditiva.