Las migrañas son mucho más que simples dolores de cabeza y para aquellos que las sufren son bastante molestas. ¿Por qué ocurren? ¿Qué relación tienen las migrañas con la visión? Es fundamental entender esta conexión para saber cómo afrontarlo, y buscar el mejor tratamiento posible. En esta entrada del blog te lo contamos.
El efecto de las migrañas en nuestro cuerpo
Las migrañas son trastornos neurológicos frecuentes que causan episodios de dolor de cabeza intensos. Este dolor de cabeza, también conocido como ataques de migraña siempre van acompañados de otros síntomas como náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz y al sonido. Aunque las migrañas afectan a cada persona de manera diferente, la mayoría de las personas que dicen que experimentan un dolor punzante que dura horas o incluso días.
Durante estos ataques, se cree que hay cambios en la actividad cerebral que afectan los vasos sanguíneos y las sustancias químicas cerebrales, como la serotonina. La serotonina es un neurotransmisor que desempeña un papel crucial en la regulación del estado de ánimo y el dolor. En un episodio de migraña, los niveles de serotonina disminuyen y por eso el motivo del dolor.
La conexión entre las migrañas y nuestra visión
Muchas personas que sufren migrañas experimentan lo que se conoce como aura visual, una serie de síntomas visuales que actúan como avisos del dolor de cabeza que se aproxima. Estos avisos incluyen destellos de luz, líneas onduladas o manchas ciegas que oscurecen partes del campo visual. Esta experiencia visual previa a menudo alerta a los pacientes de un inminente episodio de migraña, permitiéndoles prepararse para lo que está por venir.
Vemos las cosas de una forma más borrosa
El tiempo que dura la migraña es relativo y según la persona, como hemos comentado. Durante este proceso, podemos apreciar como los contornos de los objetos se vuelven borrosos, y los colores más intensos. Esta pérdida de claridad visual hace que sea difícil conducir o leer un simple texto corto, por lo que deberemos guardar reposo. Los mareos y la desorientación son síntomas comunes que también pueden aparecer durante una migraña.
Nos volvemos más sensibles a la luz
Es una característica común de las migrañas. Las luces brillantes, incluso las normales, pueden resultar muy molestas para quienes sufren de migrañas. Esto no solo agrava el malestar, sino que también hace que la exposición a entornos luminosos sea prácticamente imposible durante las migrañas. Es recomendable estar a oscuras o en su defecto, bajar lo máximo posible las persianas.
Como hemos visto, las migrañas no son solo dolores de cabeza puntuales, sino que son frecuentes en las personas que las sufren y que, además, está relacionada directamente con nuestra visión. Aunque no hay un tratamiento directo contra las migrañas, siempre es recomendable tomar precauciones y controlar nuestra salud visual visitando regularmente a un especialista oftalmólogo.
